La Habana.- LA FAMILIA de la esgrima cubana ha reaccionado con profundo pesar por el deceso, víctima de una penosa enfermedad, de Orlando Ruiz Valdés, de los integrantes de la gloriosa delegación a los X Juegos Centroamericanos y del Caribe de Puerto Rico 1966.

Ruiz Valdés fue de los que abrazó la idea del Comandante en Jefe Fidel Castro de llevar el deporte cubano a su máxima expresión, por lo que dio impulso a la esgrima en la antigua provincia de Las Villas.

Espadachín y floretista, su quehacer lo llevó a conquistar plata en el florete por equipos de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Jamaica 1962, así como también bronce en los panamericanos de Winnipeg 1967 y en los centroamericanos y del Caribe de Panamá 1970, también por colectivo.

Residente en sus últimos años en el municipio matancero de Cárdenas, fue sepultado hoy en el panteón de las glorias del cementerio de Santa Clara, ciudad donde nació.

Quien estaba por cumplir el 23 próximo 78 años, deja dos hijos, tres nietos,  un biznieto y miles de amigos, los cuales coinciden en su calidad humana y su dedicación al deporte y a sus seres queridos.

Llegue a todos las condolencias de la familia deportiva cubana, especialmente de la Dirección del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER).