Artemisa.- EL LOCAL Lázaro González sonrió ante su público hoy al entrar victorioso en la décima etapa del Clásico Nacional de Ciclismo, escoltado en el podio por el habanero Alejandro Carriles y el matancero Cristian Pérez, tres de los seis fugitivos que no pudieron ser neutralizados antes de llegar a la raya de sentencia.
Desde Matanzas a esta localidad los punteros marcaron 4:05.25 horas en los 166 kilómetros y con el triunfo del anfitrión el equipo de Artemisa sumó así su tercer éxito parcial en el giro, que comenzó el 14 de febrero en Guantánamo y concluirá el domingo frente al Capitolio.
La batalla de este viernes comenzó la víspera de la volante en Madruga (km 35), cuando fructificó la primera escapada, entre los que se involucraron Yasmani Cabello (Las Tunas), Willy González (Santiago de Cuba) y Osmani Pérez (Ciego de Ávila), ubicados en ese orden en la raya intermedia.
Los seis continuaron delante y en Güines (km 58) cruzaron la volante en punta el mismo trío, pero en orden adverso: Pérez, González y Cabello, comenta en su nota el colega Willy Hierro.
Atrás el pelotón se agrupó sobre el km 65 de recorrido, momento en que el matancero Cristian Pérez se zafó de la bola, le puso potencia a sus pedaladas y se separó a más de tres minutos de la serpentina multicolor para llegar solo a San Antonio de los Baños (km 120) y aseguró el premio intermedio.
Le perseguía un pequeño grupo de cinco ciclistas, quienes disputaron el segundo y tercer puestos, que correspondieron al guantanamero Ángel Hidalgo y el holguinero Miguel Valido, respectivamente.
A 15 kilómetros de la localidad de Artemisa se despegaron el capitalino Carriles y a la postre el ganador de la etapa, Hernández, quien elevó el júbilo de toda su afición cuando cruzó vencedor por la raya final, en tanto a su rueda lo hizo el propio Carriles, mientras que Pérez se embaló entre los otros fugitivos y saboreó un merecido podio.
Los líderes mantienen sus camisetas y no parece que habrá cambios con respecto al líder de la clasificación general individual, pues el santiaguero Pedro Portuondo ha exhibido muy buena forma y si bien pedalea fuerte en las lomas, también lo hace en el plano, y mañana la undécima y penúltima jornada es en contrarreloj individual sobre un tramo de 35 kilómetros.
La salida está prevista en el entronque de La Herradura con meta en Pinar del Río y como es en este tipo de prueba salen en orden inverso a la posición en la general con un minuto de diferencia y dos entre los diez últimos pedalistas en tomar partida, precisamente los punteros del giro.
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