El Héroe Fernando González y el manager Carlos Martí. Foto: JIT Colaborador

Bayamo.- MUCHAS razones avalaron la decisión de celebrar aquí el análisis del cumplimiento de los objetivos de trabajo del INDER en el 2014, un período marcado por el dominio ejercido en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz.

«Es una posibilidad de salir de nuestro cuartel general para apreciar junto a sus protagonistas lo que se hace en la base», dijo el presidente del organismo Antonio Becali, y lo vivido en esta urbe repleta de historia le dio la razón.

Se sucedieron un debate signado por la ausencia de regodeos para priorizar lo que está por hacerse, el privilegio de compartir con el Héroe de la República de Cuba Fernando González y el recorrido por instalaciones frutos de un evidente sentido de pertenencia.

«Debemos interiorizar lo imprescindible de erradicar todo lo que no está bien y depende de nuestra voluntad, nuestra inteligencia, nuestro ejemplo y nuestra consagración real y constante a esta gigantesca y hermosa obra de la Revolución», precisó el informe analizado.

Y en esa línea se proyectaron directores provinciales, el rector y decanos de la Universidad de las Ciencias de la Cultura Física y el Deporte, y otros especialistas convencidos del caudal de potencialidades por explotar.

Fue bueno constatar la decisión de impulsar la ciencia desde una visión tan abarcadora como apegada a lo requerido por cada área, así como el reconocimiento a lo imprescindible de que la superación se convierta en herramienta cotidiana en la base, porque esa es la génesis de la pirámide.

Estimuló igualmente el llamado a romper esquemas en busca de responder a los retos en ajuste a las características de cada territorio, como sucede con la demanda de formación de profesionales y técnicos en zonas montañosas santiagueras.

Primó la objetividad y quedó una señal de optimismo alejada de la complacencia, se ratificó el compromiso con el subliderazgo en los Juegos Panamericanos de Toronto y hubo aplausos cuando se insistió en que la disciplina es una clave insustituible en tiempos de exigencias redobladas.

Similar fue el mensaje en torno a la preparación integral y lucha ideológica en medio de una subversión acrecentada, y alentadoras las palabras del presidente del Comité Olímpico Cubano José Ramón Fernández, comunicado vía telefónica con los asistentes a la cita.

EMOCIONES Y EJEMPLOS

Las emociones hicieron aparecer más de una lágrima cuando la EIDE Pedro Batista abrió sus puertas a Fernando González y este se mostró desde toda su sencillez al conversar animadamente con alumnos y profesores que terminaron fotografiándose con él.

«Lean y profundicen todo el tiempo sobre nuestra historia», dijo como parte de un intercambio en que calificó de «sumamente importante» el encuentro suyo y de sus cuatro hermanos con el Comandante en Jefe Fidel Castro e instó a los estudiantes a ser siempre fieles a sus raíces.

El también vicepresidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos departió además con los miembros de los equipos Granma y Ciego de Ávila, enrolados en una de las semifinales del béisbol nacional.

«Les damos las gracias a todos ustedes por la alegría que le han dado a los habitantes de sus dos provincias y a todo el pueblo de Cuba, lo más importante es que nuestro béisbol siga ganando y nuestro deporte sea cada día mejor», sostuvo el héroe, quien recibió un uniforme de la selección local.

Ambos momentos conformaron el preámbulo de un enriquecedor acercamiento a instalaciones nacidas o rescatadas como expresión de cuánto pueden generar el compromiso y la convicción de pasar sobre las limitaciones.

Lo mismo en el combinado deportivo 26 de Julio que en el Rosa la Bayamesa los visitantes comprobaron el resultado de una labor que respaldada por el Partido y el Gobierno convirtió en constructores a especialistas del deporte y la cultura física.

«Todo esto es fruto de la manera en que nuestros trabajadores respondieron a la convocatoria, y a partir de eso nos ganamos el apoyo recibido», aseguró el director municipal Yudismar Leyva, sanamente orgulloso de la imagen que hoy muestran no pocas áreas donde antes reinaban el marabú o los escombros.

El panorama impresionó también en zonas de los combinados Camilo Cienfuegos, Siboney o Centro Bayamo, y vincula funcionalidad, buen gusto y preservación de lo erigido en pos de la calidad de vida de la población.

Ese es el sello apreciado en gimnasios biosaludables y de cultura física, la academia de ajedrez Carlos Manuel de Céspedes, el gimnasio de boxeo Teófilo Stevenson, terrenos de béisbol y voleibol o las salas de tenis de mesa, esgrima, judo y otras disciplinas.

«Todavía no estamos satisfechos, porque sabemos que podemos hacer otras muchas cosas y en eso estamos trabajando», indicó Leyva junto a varios de los artífices de la obra que aunque lejos de ser perfecta merece elogios.

No por gusto las autoridades del territorio identifican al INDER entre sus organismos vanguardistas y los más de 2 000 integrantes del sector hablan de lo realizado como algo que les honra, al tiempo que insisten en sumarle otros eslabones y ponen toda esa experiencia a disposición de los demás.