La Habana.- PASADAS las siete de la noche aterrizó la nave aérea con la preciada carga. Por esas coincidencias de la vida, era la víspera de un aniversario más del desembarco de los expedicionarios del yate Granma, quienes entonces comenzaban la recta final de nuestras luchas por la libertad. Sin embargo, nuestros deportistas llegaban a casa con el deber cumplido, con el honor y las medallas a cuestas.

Al pie de la escalerilla los esperaba el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Partido y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros. Uno por uno, los miembros del último grupo de la delegación que nos representó en los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014, recibieron la calurosa bienvenida a casa.

Llegaron luego las emociones de la ceremonia de bienvenida, en la que el luchador Mijaín López, abanderado de la comitiva, expresó en nombre de los atletas la alegría por haber regresado a la Patria con la medalla de la dignidad, «un compromiso que todos aquí hemos sabido respetar». Además, el multilaureado gladiador expresó el agradecimiento de todos al pueblo por haber hecho posible momentos tan lindos. «Estamos aquí, con nuestra Revolución, y pienso que es el orgullo más bonito que puede tener un atleta», sentenció.

Por su parte, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, destacó el papel de la delegación que regresó a la Patria victoriosa, digna, y con el triunfo en la cita centrocaribeña.

En su intervención, el dirigente señaló que «ustedes han demostrado que el movimiento deportivo cubano, en pleno perfeccionamiento, en plena actualización, va teniendo una nueva hornada, una nueva generación de deportistas que han asumido el legado histórico de ese movimiento deportivo en la Revolución y ya están escribiendo también su propia historia. Están prestos entonces para entregar nuevas victorias a la Patria, a la Revolución y a nuestro socialismo».

«No nos vamos a deslumbrar con la victoria. De inmediato vamos a hacer los análisis de las experiencias que nos aportan estos Juegos Centroamericanos, y también de inmediato vamos a comenzar la preparación para los compromisos y retos futuros, y en particular para los Juegos Panamericanos el próximo año en Toronto», enfatizó Díaz-Canel.

Concluido el acto, y en un aparte con JR, el boxeador Lázaro Álvarez, campeón en la cita, compartió sus impresiones sobre el sentido recibimiento. «Para mí, y pienso que para el resto de los atletas, es un orgullo que el Presidente de nuestro país nos haya recibido, porque eso demuestra la importancia de estos Juegos Centroamericanos, y reconoce el esfuerzo que hicieron todos los atletas por mantener a nuestro deporte en la cima del medallero».

El también titular mundial consideró que ese apoyo de las principales autoridades del país «estimula a los atletas para que sigan luchando y dando alegrías al pueblo cubano, para seguir demostrando lo que es nuestra Cuba».

A la ceremonia de bienvenida también asistieron Mercedes López Acea, miembro del Buró Político y primera secretaria del Partido en la capital; José Ramón Fernández, presidente del Comité Olímpico Cubano, y Fernando González, Héroe de la República de Cuba. (Tomado de Juventud Rebelde)