La Habana.- EL INGENIERO Jorge Jesús Peña Borges, presidente de la Federación Cubana de Caza Deportiva (FCCD), falleció este lunes aquí como consecuencia de una repentina enfermedad.

«Los amantes de la caza deportiva están de luto», destacó Osvaldo Ramírez Moracho, titular de la FCCD en la provincia de Holguín.

Natural de Jovellanos, en la provincia de Matanzas, Peña Borges lideró por más de un quinquenio la organización de la que fue fundador hace más de cuatro decenios.

Integrante del equipo nacional de tiro deportivo en la década de los 80, el máster deja una amplia hoja de servicios que va desde director de un Complejo Agroindustrial en la provincia de Camagüey hasta profesor universitario.

Nacido en la localidad de Carlos Rojas, en la provincia de Matanzas, el también máster dedicó sus últimos años de vida a la entidad que le imprimió vitalidad sin igual desde su fundación.

De amplio verbo, trabajó por la unidad de los más de 40 mil afiliados a la FCCD, a la que igualmente dotó de identidad, reconocimiento y organización que le granjearon el apoyo de la mayoría de su membresía.

Peñita, como le llamaban sus más allegados, centró sus esfuerzos en ubicar a Cuba en la palestra internacional concretado en la membresía de nuestra nación en el Consejo Mundial de Federaciones Deportivas de Caza y Tiro (Fedecat).

Por su especial gestión y la de su ejecutivo de trabajo, por vez primera asistió un atleta cubano a un certamen planetario de la caza deportiva, ese celebrado en Argentina, del que derivó el proyecto de incluir a la Isla en el circuito internacional competitivo como sede de un evento.

Los logros de su gestión al frente de la FCCD incluyen la celebración de la I Copa Nacional de Caza del Faisán Ernest Hemingway, con sede en áreas cercana al Jardín Botánico de La Habana en el año 2018, y ubicar la caza deportiva aquí en el camino de la sostenibilidad.

Igualmente sobresalió su quehacer para formar alianzas con el Ministerio del Interior en el enfrentamiento a cazadores furtivos, al de la Agricultura en el interés de la conservación de la fauna, con universidades para la investigación de la fauna nacional, entre otros.

Peñita, defensor del proyecto revolucionario cubano, murió en un centro hospitalario capitalino, donde fue tratado por obstrucción del colédoco (hígado) que generó una insuficiencia hepática, aunque el parte médico determinó tromboembolismo pulmonar como causa del deceso.

Su cadáver fue trasladado a su querido terruño yumurino para celebrar sus honras fúnebres.

Llegue a familiares y amigos el mensaje de condolencia de la familia de la caza deportiva y el deporte cubano en general.