La Habana.- INTENSIFICANDO el trabajo en jornadas que se vuelven agotadoras, pero a la vez animadas por la cercanía del clasificatorio olímpico andan por estos días los seis integrantes del equipo cubano de tiro con arco que asistirán al Campeonato Panamericano de Monterrey, en México.

Muchas flechas disparadas a la distancia de 70 metros en matches que modelan la competición, prevista para iniciar el 24 de marzo y que repartirá los últimos tres boletos individuales en uno y otro sexo, con la condición de que solo no se podrá repetir atletas de un mismo país.

«Estamos haciendo modelajes con matches mixtos para tener más opciones de fogueo», comentó a JIT el entrenador Vladimir Quintas, que solo cuenta en la concentración nacional con Adrián Puentes, Hugo Franco y Juan Carlos Stevens entre los hombres y Elizabeth Rodríguez, Maydenia Sarduy, Riaselis Fleitas por la mujeres.

«Es la única manera de ganar en cantidad de partidos y aprovechar más estas tres semanas que nos quedan», recalcó Quintas, quien enfrenta –como el resto de los responsables de equipos nacionales– una situación atípica generada por la pandemia de la COVID-19.

Los cubanos se enfrentarán a la cita azteca un año después de lo previsto y luego de pasar por varios meses de aislamiento social durante el 2020, algo que provocó lógicas adecuaciones en la preparación y las cargas a enfrentar.

«La prioridad es la Ronda porque es en los matches que se definen las clasificaciones. Ese tiene que ser el énfasis para corregir situaciones que se pueden dar ya en la competición», explicó el experimentado técnico.

Interrogado acerca de los destaques individuales acotó que todos están trabajando bien, enfocados en el objetivo, pero mencionó a Adrián, Hugo y Elizabeth como los de mejores resultados hasta ahora.

El reparto oficial de plazas será el 27 de marzo, un día antes de que se definan los campeones del torneo continental como tal.

Desde el campeonato mundial del 2019 se repartieron los primeros boletos (se aseguraron ocho países como equipo) y en los próximos meses además de América se completarán los puestos en Europa y Oceanía, además de una última oportunidad por conjuntos en la Copa del Mundo que pudiera acoger París en junio.

Todo ese calendario está pendiente de confirmación en medio de un panorama asediado por la trasmisión de la COVID-19 y que ha obligado a no pocos cambios anteriores.

Cuba también buscará en Monterrey un puesto para los Juegos Paralímpicos de Tokio. El pinareño Alejandro Hernández, quien se prepara en su provincia, será el encargado de intentar ese objetivo.