Sancti Spíritus.- «LOGRÉ poner la bola donde quise», aseguró hoy el lanzador granmense Lázaro Blanco en relación con el control ejercido sobre Pinar del Río en duelo donde su elenco colocó 3-2 la primera semifinal de la 60 Serie Nacional de Béisbol.
«Hice los ajustes necesarios, dominé bien los rompientes y también la recta», explicó el derecho minutos después de que la pizarra del estadio espirituano José Antonio Huelga mostrara marcador final de 12 carreras por cuatro y él celebrara su cuarto éxito de la postemporada.
«Lo fundamental es la dedicación y la entrega que pongamos cuando subimos al box», añadió Blanco, quien apenas toleró cuatro imparables en siete capítulos en los que propinó tres ponches y dio un boleto.
El mejor pitcher de los Alazanes comentó que se empeñó en sacar el out inicial de cada acto y mantenerse por encima de los bateadores, y consideró lógica su salida cuando sumaba 73 envíos y cedió el puesto a Kelvis Rodríguez, quien luego dio paso a Carlos Santana.
«La decisión permite que trabaje en un posible séptimo partido, y claro que estaría dispuesto, pero ahora lo importante es que ganamos y estamos a una victoria de pasar a la final», resaltó sobre un paso que su selección buscará acuñar sábado, porque mañana no habrá acciones.
«La intención de todos es no pasar del sexto juego», puntualizó al respecto el jardinero Raico Santos, quien volvió a brillar a la ofensiva al producir de 4-3 e impulsar una tríada de anotaciones.
«Me siento física y mentalmente bien, me están saliendo los resultados, incluida la misión de impulsar carreras, y me satisface dar lo mejor sobre el terreno para que el equipo logre lo que nos hemos propuesto», aseveró.
«Salgo a divertirse, porque hago lo que me gusta, lo que amo, y por eso disfruto tanto la sana emulación con mi primo Roel», agregó antes de concluir que «eso motiva que el equipo se contagie».
El mentor Carlos Martí, complacido con el quehacer de Blanco y un ataque de 14 imparables, aún no decidió si Granma dependerá de Leandro Martínez o César García en la jornada sabatina, cuando su homólogo Alexander Urquiola enviará al montículo a Bladimir Baños.
La esperanza del timonel veguero es que este facture un desempeño a la altura de su rango, meta incumplida hoy por Erlis Casanova, explotado tras soportar seis carreras y ocho incogibles en solo 3.1 innings.
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