YANKIEL Mauris constituyó la principal pieza del relevo de los Gallos espirituanos en la pasada contienda beisbolera.
En 17 encuentros relevó 16, ganó seis, salvó dos y no conoció la derrota. Enfrentó a 203 bateadores y le conectaron para 271 de average. Además propinó 39 ponches y regaló 15 bases. Su PCL de 3,56 y un WHIP de 1,33 sellaron una excelente campaña.
En esta 60 Serie Nacional de Béisbol, el joven oriundo de Taguasco marcha entre los líderes en juegos ganados y asegura que «salgo dispuesto a alcanzar la victoria y para ello estudio a los bateadores contrarios. Eso me permite lanzar más cómodo y cumplir las estrategias de mis entrenadores y el director.
»Lo importante es dominar a la mayor cantidad de oponentes posible, sobre todo abriendo las entradas, para disipar complicaciones. Esa es una de las orientaciones más reiteradas por los entrenadores Ismel Jiménez e Ifreidi Coss, quienes fueron lanzadores muy inteligentes», indicó.
Sobre su preparación para el certamen doméstico abundó: «Desde inicios de año trazamos estrategias, pero la pandemia de COVID-19 nos alejó de los entrenamientos en el Estadio José Antonio Huelga y nos obligó a mantener el confinamiento.
»Alrededor de las cinco de la tarde comenzaba mi jornada de entrenamientos: calentamiento, ejercicios de mecánica con toalla y lanzamientos a un home plate improvisado en casa. Para una serie de 75 juegos creí importante trabajar la fuerza en brazos, hombros y piernas», señaló.
El espigado tirador, debutante en series nacionales en la campaña 2014-2015, manifestó que para este año le dieron la tarea de preservar ventajas y neutralizar repuntes ofensivos de las novenas contrarias, roles para los cuales se preparó desde el principio.
«No me presiono en esas situaciones del partido porque salgo a cumplir mi función dotado de argumentos técnicos. La preparación ha sido precisa y mientras avanza el calendario me siento en mejor forma. Pienso regalarle más triunfos al equipo, ya sea como abridor o relevista», aseveró.
El espirituano conversó además sobre su inclusión en el listado de talentos del béisbol cubano, de cara a venideros compromisos internacionales.
«Esperé con ansias la revelación de la información, pues pensaba estar entre los lanzadores. Tuve buena actuación en la pasada serie nacional (6-0) y en el campeonato panamericano sub-23, en el cual conseguimos las medallas de plata», afirmó.
«Al tener la confirmación me sentí orgulloso de que tomaran en cuenta mis resultados. Reconozco que se trata de una responsabilidad en lo deportivo y lo personal. Hablamos de una selección a cuatro años, así que mi trabajo consiste en mantenerme. Eso dependerá de mi esfuerzo. Toca prepararme y estar a la altura de las expectativas».
Mauris argumentó que al interior del elenco espirituano reina la unidad, la cohesión y los deseos de ganar, elementos imprescindibles para sumar victorias. Tuvo asimismo palabras de elogio para su mánager, el campeón olímpico Eriel Sánchez.
«Lo tuve como receptor, cuando estaba activo, y ahora tengo el privilegio de que me dirija. Para mí está entre los mejores directores de Cuba. Se encarga de motivar al grupo y no se le escapa un detalle en el terreno», sostuvo.
Finalmente puntualizó: «Mi máximo sueño como pelotero es salir campeón con Santi Spíritus e integrar el equipo Cuba absoluto. Cada día me preparo para lograr esos objetivos».
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