La Habana.- EL MATANCERO Ariel Martínez se resintió la lesión que lo ha hecho perderse buena parte de la temporada en la Liga de Béisbol Profesional de Japón, y tendrá que esperar cómo marcha su recuperación para regresar al juego diario.

Inmediatamente que conocimos esta desagradable noticia y gracias a las bondades de internet nos comunicamos vía Whatsap con el receptor yumurino, quien ofreció detalles de lo sucedido.

«Apenas jugaba mi tercer partido después de la recuperación, en el tercer turno estaba en dos bolas sin strikes, perdiendo 1x0 y salí a hacer un swing grande. Me tiraron un cambio de bola, me descolgué y me volví a resentir la lesión, casi de la misma forma que la primera vez», explicó.

El joven de apenas 24 años de edad espera no perderse tantos juegos. «No tengo tanto dolor como la vez anterior, en las próximas horas me van a chequear y vamos a ver qué dicen los médicos. Aunque no espero demorar tanto fuera, ya siento frustración porque la temporada va caminando y le quedan unos 40 choques», agregó.

Ariel aclaró que aunque esta lesión es muy frecuente en los cátcheres, a él no le molestaba para defender, sino para batear.

«Es frecuente que a los receptores se les vire ese dedo cuando estás recibiendo y el dolor es por dentro. Mi dolencia es por la parte externa, para recibir no tenía problemas. La lesión ha sido bateando, incluso durante la recuperación hice bastante bullpen y no tenía molestias», detalló.

Antes de lesionarse, Ariel Martínez demostraba sus potencialidades en el primer equipo de los Dragones de Chunichi. Promediaba 296, con 21 imparables en 71 veces al bate, tres dobles, par de cuadrangulares, 10 remolques y seis anotadas.

«Este año venía con más confianza, en los dos primeros años el trato fue como aislado, realmente no me dieron oportunidades. La nueva dirección del equipo confió en mí y siempre que me ponían lo aprovechaba. Todo el mundo está contento y pude explotar mis condiciones. Realmente no me lo habían permitido en los años anteriores», recordó.

Martínez Marrero manifestó que la liga japonesa es muy rigurosa y les cuesta bastante adaptarse. «Se juega todos los días y se entrena mucho, tenemos que viajar antes y después de los juegos. Es cierto que los traslados son bastante cómodos y rápidos, pero en Cuba no estamos acostumbrados a eso. A veces no estás a tope físicamente, sobre todo para defender la receptoría. Por lo demás me va bastante bien, no hay dudas de que son otras las comodidades cuando estás en el primer equipo», reconoció.

En Japón se le da mucho valor al receptor cuando se entiende bien con un lanzador, y más cuando este último logra buenas actuaciones. Por eso nos asombramos cuando, a pesar de estar en gran forma con el madero, no alineaba como regular.

«Aquí la batería (cátcher-pítcher) se repite cuando funciona. Tenemos un coach de batería, al que en Cuba le llamamos entrenador de los receptores. Cuando un lanzador tiene buenos resultados, por ejemplo conmigo, la próxima vez que vaya a trabajar me ponen a mí. Sí va a lanzar uno que siempre tiene buenos resultados con otro máscara, aunque yo haya bateado el día antes me sientan y lo colocan. Le dan mucho valor a la batería y no solo al lanzador», comentó.

Ariel Martínez aseguró que sigue al detalle nuestra 60 Serie Nacional de Béisbol, especialmente a su conjunto matancero. «Un saludo para toda Cuba, espero que estén contentos con el regreso de la Serie. Veo sólido a Matanzas, ya tomaron confianza y desde aquí los estoy apoyando. Los sigo jugada a jugada y estoy muy contento con la actitud del conjunto, que después de perder los dos primeros juegos barrieron como visitante a la gran selección de Las Tunas», refirió.