La Habana.- AUNQUE este sábado arranca el salto de longitud entre hombres en la Liga del Diamante 2019, con la parada de Shanghai, la afición cubana deberá esperar hasta el próximo 30 de mayo para ver en acción a su estrella Juan Miguel Echevarría, confirmado para la parada de Estocolmo.

Hoy en la urbe China están anunciados entre otros el sudafricano Luvo Manyonga, hombre más estable de los últimos tiempos; el local campeón de los juegos asiáticos Wang Jianan y el griego monarca de Europa Miltiádis Tentóglou. Allí se repartirán los primeros puntos para un ranking que se irá completando durante la temporada y tendrá final en Bruselas el distante 6 de septiembre.

Sin embargo, desde hace unas horas en el sitio web de la IAAF y del propio circuito internacional comenzaron a promover la presencia del caribeño en la ciudad sueca. Juan Miguel y la triplista colombiana Caterine Ibargüen acapararon titulares, pues aportarán atractivo al Mitin.

Juan Miguel se entrena junto al preparador Daniel Osorio en la localidad alemana de Stuttgart desde finales de abril pasado y han aprovechado la estancia para intensificar en especial el aspecto técnico, sobre todo los temas de la carrera y el despegue.

«Con el despegue comenzamos la semana anterior, seguimos enfatizando en la carrera y todo lo que es preparación física», dijo Osorio, quien confirmó que todo se está haciendo paso a paso, cumpliendo con la planificación prevista.

«Estamos trabajando fuerte, por etapas, sin apurar nada y sin cambiar lo que diseñamos al inicio», recalcó sobre la realidad del campeón mundial bajo techo del 2018 y uno de los pilares de la Isla para los Juegos Panamericanos de Lima.

Las paradas de Rabat el 16 de junio y Lausana el 5 de julio se mantienen en la planificación, como los otros encuentros diamantinos, en tanto se ratificó que debe participar además en mitines en Austria el 8 de junio y en Londres el 20 de julio.

La cita multideportiva de Lima se convertirá en el primer gran evento para el camagüeyano, quien este año finalizó la corta temporada invernal con marca de 8,21 metros y luego “voló” en la Copa Cuba hasta los 8,92 metros, aunque con viento a favor superior al permitido y por ello no fue homologado.

El alumno de Osorio comenzó el 2018 con 8,40 metros como marca personal y la elevó hasta 8,68 al ganar en la reunión de Bad Langensalza, en Alemania. Un poco antes, en el propio Estocolmo, había clavado los pinchos en 8,83 con ligerísimo viento a favor y tampoco pudo inscribirse como válido.

De ahí las expectativas con que se le espera nuevamente en la lid, en que la afición estará pendiente de un posible gran salto.