La pelea nunca estaba perdida
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Contactado por JIT poco después de la ceremonia organizada para despedirle oficialmente del deporte activo, el bronceado olímpico de Sydney aceptó un intercambio que transcurrió fluido.
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La Habana (27 ene).- CON DIÓGENES Luna la pelea nunca estaba perdida.
«Es de esos atletas que los entrenadores siempre queremos en el equipo», dijo Sarbelio Fuentes en pleno Campeonato Mundial de Belfast´01, donde el guantanamero se erigió monarca ligero welter.
El estratega graficó así la entrega de un púgil que remontó más de una desventaja inicial, se burló de sus limitaciones en estatura y alcance y atesoró otros premios internacionales, incluido un bronce olímpico que al menos pudo ser plata.
Tres años después de su último pleito, Luna volvió a ser noticia hace unos días, cuando su provincia natal le aplaudió en ocasión de la ceremonia de retiro durante la final del torneo Playa Girón.
Entonces JIT propuso el intercambio que él aceptó sin rodeos.
¿Cómo descubres tu amor por el boxeo?
Comencé a los ocho años. Recuerdo que fue el 5 de mayo de 1985, porque el día primero había sido mi cumpleaños. Mi papá me pidió que lo acompañara a ver a un amigo, y resultó que era Rafael Ramírez, “Chipo”, quien se convirtió en mi primer entrenador.
Me preguntó si me gustaba, le dije que sí, y me citó para el día siguiente.
¿Atrapado desde entonces?
Me gustó desde el principio, y nunca lo dejé, aunque mi mamá pensaba lo contrario y me sacó siete veces del gimnasio.
¿Cuándo te convenciste de que podías pensar en grande?
Siempre tuve las lógicas aspiraciones de un niño que se entrega al deporte, pero fue importante que en 1989 me seleccionaran para la EIDE, asistir a mis primeros Juegos Escolares, en la categoría 13-14 años, y lograr medalla de plata. Después fui campeón en la 15-16, en 1992, me llamaron a la ESPA nacional y supe que podía proponerme otras metas.
Que comienzan a concretarse en 1994...
Sí, ese año gané el campeonato centroamericano juvenil, en Venezuela, y el mundial de la categoría, en Turquía, donde además fui seleccionado el más combativo.
Desde entonces la fogosidad como distinción.
Realmente ese fue mi estilo, pero exigió mucho rigor, porque requería de buena forma para mantenerlo durante todo el combate. Mis entrenadores, Honorato Espinosa y Julio Mena, lo sabían y me exigían mucho.
Y los comentaristas acuñaron aquello de «un atleta que no da ni pide tregua».
¿Entonces el gimnasio fue la clave?
Mantener la intensidad, marcar siempre el ritmo y buscar el intercambio para neutralizar a hombres que muchas veces me superaban en la distancia solo era posible manteniendo un alto nivel de preparación.
Ganaste varios eventos de importancia, como la Copa Mundial de 1998, en China, y los Juegos Panamericanos del 2003, en República Dominicana, pero el bronce olímpico de Sydney fue de mayor rango, aunque dejó insatisfacciones...
Sí, fue importante y triste a la vez, porque me sentí perjudicado en la pelea por plata. Había quedado bye para la primera vuelta, debuté ganándole 25-14 al francés Willy Blai y después vencí por RSC en el segundo asalto al egipcio Salen, y aseguré bronce.
Entonces llegué a la semifinal contra el estadounidense Ricardo Williams, un hombre de reconocida calidad, y el combate fue intenso, de mucho golpeo, pero estoy seguro de que gané, aunque él recibió el veredicto 42-41.
Y un año después tuviste cierta compensación al coronarte en Belfast.
Ese fue un Campeonato Mundial para el que tuvimos una buena preparación en Turquía. Fue un trabajo muy riguroso, con todos en el peso y peleando con rivales de categorías superiores. Llegamos con muy buen estado de ánimo, bien concentrados, y dispuestos a darlo todo.
Realmente disfrutamos ese evento, no sentimos agotamiento, y las siete medallas de oro respondieron al deseo que imperó en el colectivo.
¿Mantener el peso corporal te presionó mucho?
Solo estuve aliviado en los 67 kilos, categoría en la que gané la Copa del Mundo y los Juegos Centroamericanos de Maracaibo´98.
Después se decide que baje a los 63,5, y eso me exigía sacrificios, pero en realidad cuandoall women cheat click how many people cheat all women cheat click how many people cheat cheats link reason women cheat reasons wives cheat on their husbands read here I cheated on my husband reasons wives cheat on their husbands click I cheated on my husband natural abortion pill ru486 cost medical abortion pill online risks of abortion pill link link reasons married men cheat click love affairs with married men bystolic discount coupon daliresp patient assistance aspiration abortion cost open how to get the abortion pill
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